XIV Trofeo Páris

Antes de lanzarme a escribir la crónica de esta edición he releído una vez más la del año pasado con la intención de buscar similitudes y diferencias. Y tengo que decir que ha sido la misma carrera pero a la vez distinta. Los mismos caminos. Diferentes sensaciones.

Porque el año pasado antes de abrirse el plazo de inscripción estaba ansiosa por apuntarme, por "competir" en "mi parque". Porque tenía un plan y quería que se materializase.

Sin embargo este año, no sabía si tendría ánimos para participar aunque solo fuera en la carrera de 5km, como acto testimonial.

Pero a finales de noviembre, desperté. O quizá me hicieron despertar. Y tras varios meses cochineando comencé un plan. Objetivamente sabía que comenzaba tarde. Pero al menos ya estaba haciendo algo más que "vaguear".

Así, que, a sabiendas de que el objetivo del plan todavía queda lejos, pues restan más de 2 meses para su finalización, hoy había que salir a probar qué tal. No sabía muy bien qué hacer... si ir a por todas, si simplemente bajar de los 60' sufriendo menos que cuando hice los 10km de la Media de Villaverde... así que, al final ayer decidí que intentaría ir “fuerte” pero sin una pretensión determinada.

Forofos del Running: Foto de familia. Gracias, Pimisa.

Al lío. 

Con el número 5: Novatyyyyy. Para esta carrera he optado por correr con mallas piratas y creo que a pesar del frío, he acertado  

Salgo a rueda Ina y otros Forofos del Running, aguantando su ritmo el primer kilómetro. Una vez pasada la aglomeración inicial empiezan a tirar más fuerte. Misión imposible para mí. Ni he hecho el intento de seguirlos. 

Hasta el km 3 ruedo a un ritmo medio de 5,30, pero llegados a ese punto me doy cuenta de que estoy empezando a sufrir demasiado pronto, y me acuerdo del flato que en la edición pasada me entró justo a esa altura, así que he preferido aflojar. Total, sabía que estaba difícil (por no decir imposible) mejorar los 55,45 de mmp. Hemos venido a sufrir... no a agonizar durante 7km. 

En el recorrido no hay excesivas pendientes, ni de subida ni de bajada. Pero al discurrir en gran parte por caminos de tierra hay algunos tramos irregulares… 20-30 metros de subida suave… los mismos más o menos de bajada, y te rompen un poco el ritmo. Como me los conozco al dedillo lo que he hecho ha sido aflojar en cada pequeña bajada con la intención de dosificar el esfuerzo. Así hasta el kilómetro 5, donde comienza la segunda vuelta. Los ánimos de mi madre y de los forofos y consortes que esperan para la carrera de 5km me ayudan a no dejarme ir demasiado y completo el kilómetro 6 viendo que el Garmin muestra un ritmo medio de carrera de 5,39. No para tirar cohetes pero al menos pasable. 

En el kilómetro 7 me noto un poco más suelta: es la parte más cómoda del recorrido, calle ancha y en ligera bajada. Me sale a 5,29. Pero al volver a adentrarnos en los caminos de tierra me empiezo a venir abajo y sufro bastante hasta el 9 (incluso pensaba que llevaba un ritmo más lento del que luego ha resultado), si bien es cierto que sigo la misma “estrategia” que en la primera vuelta. 

Y en el último kilómetro, miro el crono y viendo que marca 50 y pico largo aprieto lo que buenamente puedo. Por un momento he llegado a pensar que podría estar rondando mi mmp. Pero al llegar a la recta final y volver a mirar el Garmin me he dado cuenta de que no podía ser: 400 metros picando un poco para arriba y con el reloj marcando 54, imposible. Y no es que me haya relajado, pero tampoco he tenido fuerzas para esprintar, quizá porque he llegado muy justa, quizá porque ya no he visto motivo para hacer ese esfuerzo… supongo que por las dos cosas. 

Y casi llegando a meta, superados los 56’ me sorprende un grito: “Venga, Vicky, que vas muy bien”. Es Lolo Chus!, de Foroatletismo, que ya ha acabado su carrera. Muchas gracias, compañero. Y me da aliento para completar los últimos metros, no sin antes recibir otro grito, esta vez de mi madre, a la que ni siquiera había visto, para entrar en meta, con un tiempo final de 56,29.

Y ahora, comparando y meditando, no sé si he sufrido más o menos que hace un año. Entonces lo dí todo. Hoy durante la carrera ha habido ratos en los que he pensado que también me estaba entregando por completo. Pero al ponerme a pensar en esos tramos donde de alguna manera he aflojado… no sé. Es posible que si hubiera apretado más ahora estaría hablando de una marca un poco más cercana a la del año pasado. Pero también es posible que por apretar más me hubiera desfondado y acabado los últimos kilómetros a ritmo más lento. En cualquier caso, lo hecho, hecho está. Y así son las cosas y así se las hemos contado.

Estoy satisfecha. Porque creo que el plan está dando resultados. En este mes y medio he visto que he mejorado y he ganado parte de lo que había perdido durante el «vagueo». Y creo que de aquí a finales de marzo puedo mejorar un poco más. No sé si bajaré de los 55 minutos, pero al menos lo voy a intentar.

Para presumir, hay que sufrir!! Gracias, Pimisa consorte!

La "sección femenina"